Mucho hablar, pero poca acción - Sólo el 50 % de los encuestados se considera en la fase de «ejecución» de la transformación digital en la actualidad, frente al 47 % en consideración y el 3 % sin estrategia digital alguna.
El talento/la capacitación sigue siendo un reto importante - La mayoría de las empresas (74 %) afirma estar en proceso de crear una plantilla con competencias digitales, pero tiene margen de mejora. Sólo el 22 % describe sus capacidades digitales internas como «fuertes».
Muchas empresas aún están probando - Asimismo, el 74 % de las empresas afirma haber adoptado «algunas» tecnologías digitales, mientras que sólo el 22 % afirma haber adoptado «ampliamente» (y el 5 % no ha adoptado ninguna).
Centrarse únicamente en el cambio centrado en los procesos o en las personas, sin tener en cuenta las grandes transiciones que se están produciendo en el ámbito de la energía y la electricidad, es arriesgado y poco óptimo, ya que deja sobre la mesa importantes ahorros de costes y ganancias de transformación empresarial. La transición energética y energética es también un requisito fundamental por derecho propio, que contribuye a los objetivos empresariales y sociales de sostenibilidad y a la mejora de la información y la inversión en materia medioambiental, social y de gobernanza (ESG).