Todos sabemos que cuando el voltaje de entrada de CA es inestable, puede ser peligroso. Es por eso que utiliza fuentes de alimentación para convertir el voltaje de CA en un voltaje de salida de CC seguro, consistente y constante. La pregunta es: ¿Qué hay que tener en cuenta al seleccionar una fuente de alimentación? En el episodio de hoy exploraremos las consideraciones clave para seleccionar la correcta para su solicitud.
Al elegir una fuente de alimentación adecuada para usted, los criterios de selección primarios son el voltaje de entrada, el voltaje de salida y la capacidad de potencia de salida. Sus opciones típicas de voltaje de entrada serán monofásicas de 120–240 V (la más común) o trifásicas de 230–480 V. La aplicación incorrecta del voltaje de entrada puede provocar que falle la fuente de alimentación. Los voltajes de salida típicos son de 12 V o 24 V, siendo 24 V el más común. La aplicación incorrecta del voltaje de salida podría dañar potencialmente sus dispositivos sensibles y costosos, como los PLC.
Para seleccionar la potencia nominal adecuada de su fuente de alimentación, sume las potencias nominales de corriente de los dispositivos que ejecutará con la fuente de alimentación y multiplíquela por el voltaje de salida de la fuente de alimentación. Esto le dará la potencia total necesaria para hacer funcionar su sistema. Siempre debe seleccionar una potencia de la fuente de alimentación que sea ligeramente mayor que la requerida para hacer funcionar el sistema. Una fuente de alimentación de tamaño insuficiente no hará funcionar el sistema correctamente, lo que provocará posibles apagados y daños al equipo conectado a la fuente de alimentación.
También es importante comprender dónde se instalará la fuente de alimentación y quién tendrá acceso al panel en la instalación. ¿Son aceptables las fuentes de alimentación de terminales roscados simples? ¿O se requiere un mayor nivel de protección del trabajador para una fuente de alimentación de terminal libre de contacto accidental con clasificación IP20?
También hay aplicaciones que van más allá de simplemente proporcionar energía estable. La primera necesidad potencial es un módulo de búfer, que funcionará junto con la fuente de alimentación para proporcionar energía a la carga durante breves fallas de alimentación de línea. Esto proporcionará una copia de seguridad a través de un capacitor para casos en los que se pierda energía total durante un corto tiempo (250 ms a 240 V, 5 s a 24 V). La otra opción es un módulo de redundancia, que le permite utilizar múltiples fuentes de alimentación de manera redundante para mantener la carga alimentada en caso de una falla del dispositivo.
Los factores finales a considerar son el espacio disponible, el entorno para la ubicación del panel en la instalación y la geografía de la instalación. Estos afectarán la forma y el ajuste que seleccione para el espacio, si necesita un dispositivo que esté clasificado para áreas de riesgo de incendio y descarga eléctrica, y si la fuente de alimentación que seleccione cumple con los estándares de aplicación de América del Norte y/o globales.